Son activos criptográficos basados en la tecnología ‘blockchain’ vinculados a un activo financiero tradicional, como la deuda empresarial
Los security tokens son activos criptográficos basados en la tecnología blockchain vinculados a un activo financiero tradicional, siendo el más común, la deuda emitida por empresas que buscan financiar sus proyectos.
Este tipo de tokens otorgan al tenedor una serie de derechos, como, por ejemplo, la percepción de un dividendo mensual o anual vinculado a la rentabilidad del proyecto que se financia y la cantidad invertida.
¿Cómo puede ayudar, y qué ventajas tiene un security token a la hora de financiar mi empresa?
La emisión de deuda corporativa es una forma muy común para conseguir financiación para mi empresa o financiar proyectos empresariales que no pueden lograrse realizarse únicamente con fondos propios.
Los security tokens pueden distribuirse a partir de una STO (Security Token Offering) sobre deuda de compañías cuyo fundamento es la financiación participativa del proyecto. Esto ofrece distintas ventajas frente a las formas tradicionales de financiación; una de ellas es la liquidez, pues los inversores pueden entrar con montos relativamente pequeños comprando tan solo un porcentaje del proyecto.
Otra es la visibilidad, pues una compañía que liste sus tokens en un marketplace dedicado a la comercialización o transmisión de security tokens puede mejorar la difusión de su proyecto a través del efecto red que genera la propia plataforma.
Por último, la tecnología blockchain garantiza transparencia y eficiencia en la transferencia de estos tokens, reduciendo la burocracia necesaria para su transmisión, haciendo más fácil la transmisión peer-to-peer (entre particulares) para el inversor que ha invertido y desea deshacerse de sus security tokens.
¿Qué tener en cuenta a la hora de emitir un security token
Lo primero, es necesario delimitar el proyecto al que van a ir destinado los fondos que pretendemos recaudar, para poder presentarlo de forma clara a los inversores potenciales y que la publicidad del proyecto y del token sea transparente.
En segundo lugar, deberemos delimitar los derechos económicos que queremos conceder a los tenedores del token. Si únicamente queremos otorgar rendimientos vinculados al proyecto podemos optar por tokenizar un préstamo participativo o una cuenta en participación; sin embargo, si queremos que los inversores pasen a formar parte del accionariado, deberemos buscar tokenizar un préstamo o bono convertibles en acciones.
Por último, deberemos elegir marketplace o lugar donde se van a comercializar los tokens, así como plataforma de financiación participativa (PFP) que gestione cobros y pagos de nuestro token.
Siempre que emitamos deuda por un importe inferior a los ocho millones de euros y su periodo de duración sea inferior a 12 meses, nuestra emisión no tendrá la calificación de oferta pública y, por tanto, evitaremos tener que elaborar un folleto de inversión que necesariamente debe aprobar la Comisión Nacional del Mercado de Valores.
Nuestra STO y su whitepaper sí deberá ser validada por una empresa de servicios de inversión (ESI), siendo, no obstante, un proceso bastante más rápido.
¿Qué proyectos de tokenización interesantes hay en España?
Uno de los proyectos referentes a la hora de financiarse a través de una STO es el surgido en el seno de la empresa Green Data Chain, división tecnológica del grupo Seroil Energy Group y colaborador de grupo LABE. Con la emisión de deuda convertible en acciones de la compañía, buscan ampliar su potencia de minado de bitcoin mediante la adquisición de nuevos equipos. El principal atractivo del proyecto es la utilización de energías renovables para el minado de bitcoin, llegando incluso a producir emisiones negativas de CO2. Con esto se solventa el principal inconveniente de la minería de criptomonedas y se otorga una ventaja competitiva a la compañía.
La tokenización de activos presenta varias ventajas como el tener un mercado de inversión más amplio que los modelos tradicionales, el poder tokenizar cualquier tipo de activo (desde una obra de arte a futuros beneficios), así como que presenta mayor liquidez para los propietarios de tokens denominados token holders.
Fuente: https://cincodias.elpais.com